Coco, muerte mágica
Coco, muerte mágica
El protagonista, Miguel, de 12 años, vive en Santa Cecilia, donde sueña con hacerse un consagrado músico siguiendo los pasos de su ídolo Ernesto de la Cruz. En su familia le prohíben ser músico debido a mala experiencia relacionada con la música. Guiado por su pasión y por un seguido de casualidades Miguel se encuentra en la Tierra de los Muertos.
Allí conocerá a sus ancestros y se embarcará en una emocionante aventura, donde conocerá a su ídolo Ernesto de la Cruz, que le llevará a descubrir su destino y la verdad que se esconde detrás de su historia familiar.
La muerte y el más allá es algo presente en todas las sociedades desde antaño. Pero no todas ellas abordan el tema de la misma manera. Una de las culturas en la que se rinde culto a la muerte es la mejicana.
En la época precolombina se tenía la costumbre de guardar los cráneos delos seres queridos y exhibirlos como símbolo de muerte y renacimiento. La muerte no tenía la concepción cristiana del bien y del mal sino que se creía que el destino de las almas venía determinado en función de la manera en que habías muerto.
Actualmente, los mexicanos siguen celebrando la muerte de sus familiares y seres queridos de una forma muy distinta a la nuestra. Además de sus costumbres esto se puede apreciar en la colorida arquitectura de sus cementerios. Por lo general, no viven la muerte como un final, sino como un nuevo inicio en el más allá. Un hasta pronto porque una vez al año celebran el Día de los Fieles Difuntos, fecha destinada a los familiares fallecidos.
En Coco aparecen varios elementos característicos de la cultura mejicana de la muerte, como el puente que conecta el mundo de los vivos y el de los muertos o el ultramundo como un lugar lleno de festividad. El puente está hecho de tagetes (Tagetes erecta), conocida también como la flor de los muertos, una flor de color amarillo anaranjado vivo, la cual está muy presente en las festividades mejicanas.
El protagonista, Miguel tiene como referente a alguien que ya no está presente aunque ha dejado un importante legado ya que la muerte no es realmente el final de la vida si en nuestra memoria y en el corazón permanecen los recuerdos de quiénes nos precedieron. Este el mensaje de fondo que destila Coco.