La muerte y la vida en el más allá
La muerte y la vida en el más allá
El Maestro Omraam Mikhaël Aïvanhov (1900-1986), filósofo francés y profesor de origen búlgaro, se estableció en Francia en 1937, destaca por una visión particular sobre la vida del ser humano: "El hecho de que cada ser humano sea un individuo distinto, no significa que esté separado de los demás. Aunque no lo vea, no lo sienta, en alguna parte de este inmenso océano que es la vida, está unido a ellos, y cada una de sus manifestaciones, sus pensamientos, sus sentimientos, sus actos les afecta."
Omraam Mikhaël Aïvanhov creó una filosofía humanista profundamente espiritual y que destacó por el gran número de conferencias que impartió y los libros que escribió encaminados a asistir en temas cotidianos sobre el sentido del ser humano, sus dificultades en el camino, etc.
Ayudar al ser humano a reencontrar su dimensión espiritual (que él llama su naturaleza superior o divina), para mejorar, para fortalecerse y abrirse al corazón del mundo donde se encuentra, es su objetivo prioritario. Omraam Mikhaël Aïvanhov precias: "Sobre todo, me he esforzado en aclarar un tema: las dos naturalezas del hombre, su naturaleza superior y su naturaleza inferior, porque es la clave que permite resolver todos los problemas."
Para ello, la asociación sin ánimo de lucro que divulga las enseñanzas Omraam Mikhaël Aïvanhov dispone de una amplia serie de "folletos" con un número de páginas reducidos que recopilan algunos de los pensamientos más significativos sobre los temas que versa la obra.
En La muerte y la vida en el más allá, el tema es obvio. Sin embargo, su mensaje no deja indiferente: "Dejad que los muertos se vayan tranquilamente adonde deben ir. En cuanto a vuestros parientes y amigos, no os acerquéis a ellos, no los retengáis con vuestras tristezas, con vuestras penas y, sobre todo no os esforcéis en comunicaros con ellos: les importunáis, y impedís su liberación. Rezad por ellos, enviadles vuestro amor, pensad que se liberan y se elevan progresivamente en la luz. Si les queréis verdaderamente, sabed que un día estaréis con ellos. Es la verdad. Cuántas veces lo he dicho: donde esté vuestro amor, un día estaréis vosotros."